La verdadera razón de la bajada de velocidad en carretera (convencional)

Estamos a vueltas con lo del limite de velocidad. Anteriormente, ZP lo bajó en autopistas para reducir el consumo, la medida duró apenas unos meses. En esta ocasión es el PP (por que mandan, más que nada) los que han lanzado el globo sonda de la bajada de velocidad en todas las vías convencionales salvo autopistas.

Según el anuario del año 2011 de la DGT, el mayor número de accidentes con victimas se ha producido en vías interurbanas, con 35.878 accidentes y 1.503 fallecidos. Le sigue los accidentes en carretera convencional con 26.462 accidentes y 1.267 muertos. En autopistas y autovías han sido 65 y 261 victimas respectivamente.
Además, se han producido más accidentes (con victimas) en días laborables que en festivos, más de día que de noche, en turismos en primer lugar, choque frontal, y en la franja de edad de 25/34 años (aunque el mayor número de victimas está en 35/44).
A continuación aparece un apartado por sexos, como no lo acabo de entender lo copio integro:
Hombre: 35.772 accidentes,  1.598 victimas.

Mujer:    58.877 accidentes,     457 victimas.

Hasta aquí la estadística de la DGT (más o menos manipulada). Me llama la atención el anuncio por parte del ministro del interior (nada más hacerse público el estudio) sobre la intención del ejecutivo de bajar el límite de velocidad en vías interurbanas y convencionales, haciendo notar que es una medida ya meditada con anterioridad. Es decir que saben lo que hacen. Enhorabuena señor ministro.

Uno piensa que nada es casualidad e imagina por donde van a ir los tiros en los próximos meses. Dado que se producen más accidentes en vías convencionales (porque son mayoría, más que nada) nos van a bajar el límite, y supongo que para hacer efectiva la medida, aumentará la vigilancia en este tipo de carreteras, con guardias y radares detrás de los árboles y cosa así. Posteriormente, en autopistas de pago, dado que es donde menos victimas hay (lógico, porcentualmente es donde menos trafico se produce) se aumentará a 140 km/h (medida ya anunciada con anterioridad). El mensaje es claro: Si quieres viajar seguro, hazlo por autovías de peaje, no por esas carreteras tercermundistas llenas de baches y rotondas, evitarás accidentes y multas. Esto será perfecto (para ellos) y si además ponen peaje en las autovías, eso sería la gloria para la administración.

Nuestro héroe (en el centro) a la derecha de dios
en un campamento de verano.

Otra posibilidad que explicaría la premura para tomar esta medida es la siguiente:
Gracias a la impagable labor diplomática del PP, Angel Carromero ya está en España. El aprendiz de espía  mandado por la Aguirre a Cuba con unos cuantos miles de euros (que pagamos todos los ciudadanos) como donativo para la disidencia cubana, que como todo el mundo sabe, no trabaja  a favor del régimen castrista precisamente.
En sus andanzas por la isla, nuestro aprendiz de espía se carga, él solito y de una sola vez, a toda la dirección de la oposición. Ni adrede le sale mejor. Todo el proceso del juicio y la condena ya lo sabemos todos.
Bueno, nuestro héroe  está de regreso y a sus jefes les ha faltado tiempo para visitarle en la cárcel y proclamar a voz en grito (en España la mejor manera de demostrar que se es poseedor la la verdad es gritando) su inocencia y la culpabilidad de la izquierda en el accidente ¿¿?? (lo dice la Aguirre, no yo). En el ayuntamiento de Madrid se han apresurado a facilitarle un puesto de trabajo como asesor (¿de qué?) Pero no quedará la carrera del chico en un despacho, un espía necesita acción. Lo mejor sería que lo nombrasen chófer de la Aguirre, con lo que viaja desde que ha vuelto a ser funcionaria (curiosa paradoja, quien más ha criticado a los funcionarios, cuando se "retira" de la política se hace funcionaria) necesita un conductor  experimentado y de clase.
Si no ha sido ella, ha sido otro, o el mismisimo Rajoy; han visto la buena disposición del chico y el inevitable destino que le espera y en consecuencia han pensado en lo de bajar el límite de velocidad.
Por lo que pueda pasar, más que nada. Lo mejor es curarse en salud.