para este fin de semana, los que no tengáis nada mejor que hacer os propongo una actividad étnico-turística que seguro no vais a olvidar.
En El Puig celebran una fiesta en honor de San Pedro Nolasco, santo cuya principal actividad consistía en la redención de esclavos; por el siglo trece más o menos.
En esta fiesta es tradicional una cucaña, en la que, entre caramelo y caramelo, ponen ratas. Si señor ratas de las de verdad. La diversión os la podéis imaginar. Romper la cucaña y si tenemos suerte y nos cae una rata, perseguirla, pisotearla, lanzarla al público.... y así.
Mejor que yo lo cuenta un cronista que pasó por allí..
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Ante la presencia de numeroso público, entre los que abundan menores de edad, los quintos del pueblo cuelgan las cucañas en las que caramelos y otras sorpresas comparten el reducido espacio con el animal, formando así una especie de macabra “piñata de ratas”. Al romper la cucaña, el animal cae al suelo desde una altura muy elevada, momento en que es brutalmente perseguido y pisoteado por los propios quintos hasta darle muerte. Una vez muerta o moribunda, la rata es arrojada una y otra vez contra las paredes y los balcones de la plaza o es lanzada sobre el público asistente. Cada año pueden llegar a morir, antes o durante la celebración, entre 10 y 12 roedores. Incluso en alguna ocasión además de ratas se han utilizado conejos, según se ha publicado sobre pasadas ediciones."
qUE VIVA hIPANISTÁN!!!!
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