¿Has leído alguno de los famosos libros de Dan Brown? ¿Esos en los que el profesor universitario Robert Langdon va descifrando pistas por medio mundo hasta llegar a encontrar algún tesoro de valor incalculable?. Pues bien, cada mes de enero, desde hace tres años, un grupo de internautas – cada vez más grande – se disfraza de Robert Langdon para desentrañar uno de los misterios más enigmáticos de la Red: qué (o quién) hay detrás de Cicada 3301.
Todo empezó el 5 de enero de 2012. Aquel día se publicó en 4chan una imagen con el siguiente mensaje: se busca gente inteligente. La más inteligente. Para encontrar a lo mejor de cada casa, quien quiera que hubiera subido la imagen había preparado un test.
Esta era la primera y minúscula pieza de un rompecabezas que tardaría un mes en acabar. Todo un puzzle que, con el paso del tiempo, ha ido generando más incógnitas de las que ha resuelto. ¿Qué hay que hacer para demostrar tu inteligencia? ¿Para quién? ¿Cuál es el premio? ¿Quizás un trabajo? ¿Se trata simplemente de un juego?
Sin lugar a dudas, la mejor forma de intentar comprender qué significa todo esto es conocer la versión de Joel Eriksson, una de las pocas personas que han logrado solucionar este endiablado rompecabezas.
Eriksson, investigador en criptoseguridad sueco, se topó por casualidad con esta primera pieza del puzzle y, aunque lo descubrió unos días después de que fuera publicado, decidió lanzarse a la aventura para ponerse a prueba. “Al principio, pensé que sería un bonito rompecabezas. Siempre he estado interesado en todo lo que me pueda desafiar y nunca me doy por vencido. En el caso de Cicada, el rompecabezas en cuestión resultó ser mucho más de lo que pensé que sería cuando empecé”, asegura Eriksson en una entrevista concedida hace unos días a la web FastCoLabs.
Efectivamente, Eriksson no tenía ni idea de dónde se estaba metiendo. Aunque la vida de los participantes nunca ha estado en peligro – creemos -, Cicada no es un rompecabezas como otro cualquiera. Es difícil (aunque no imposible) y, además, salta constantemente de lo virtual a lo real. Un poco de criptografía, una pizca de numerología maya y algo de ‘cyberpunk’ fueron las herramientas que Eriksson necesitó para llegar (casi) hasta el fondo de este siniestro asunto.
Con la imagen publicada en 4chan en su poder, Eriksson echó mano de sus conocimientos en esteganografía para empezar a tirar del hilo. Para que os orientéis, la esteganografía es una rama de la criptología que permite esconder mensajes y objetos dentro de otros, que son los portadores. Actualmente, se utiliza, entre otras cosas, para intercambiar archivos poco lícitos a través de internet. Al Qaeda, por ejemplo, escondió información sobre atentados terroristas en películas porno.
Eriksson utilizó OutGuess, un programa que le permitió destapar un mensaje cifrado. Una vez descodificado, Eriksson – y el resto de inteligentes participantes – dio con una URL en la que había otra imagen. Esta vez, una fotografía de un pato.
Y otra vez, vuelta a empezar. A tirar de más esteganografía para ver qué diantres escondía el palmípedo. A partir de aquí, la historia empieza a complicarse para el intrépido Eriksson. Una URL de Reddit con numeración maya que, traducida, llevaba hasta otras dos imágenes en las que se escondía un número de teléfono de Texas. ¿Preparados para el salto de lo virtual a lo real? Allá vamos.
¿Es el enemigo?
“Muy bien. Lo has hecho bien. Hay tres números primos asociados a la imagen final. 3301 es uno de ellos. Tienes que encontrar los otros dos. Multiplica estos tres números y añade un “.com” para encontrar el siguiente paso. Buena suerte. Adiós”.
Ese era el mensaje de voz que se escuchaba tras llamar al número de teléfono. Y es que en este enigmático rompecabezas los números primos tienen un protagonismo concedido por la que es su imagen: la cigarra. Las cigarras (‘cicada’ en inglés) tienen ciclos de vida que duran 13 o 17 años, ambos números primos.
El incansable Eriksson destripó una pieza más del puzzle y acabó en una web en la que aparecía la imagen de una cigarra y una cuenta atrás. Cuando esta llegó a cero, la imagen fue sustituida por cadenas de números que no eran otra cosa que coordenadas. Las coordenadas llevaban hasta postes de medio mundo: Francia, Rusia, España (en Granada, concretamente), Japón, Polonia y, por supuesto, un número importante de emplazamientos en los Estados Unidos. Con ayuda de otros intrépidos participantes, Eriksson tuvo acceso a las pistas físicas que se encontraban repartidas por la geografía mundial.
Se trataba de carteles con el dibujo de la dichosa cigarra y un código QR. Los códigos daban acceso a nuevas imágenes con un contenido secreto. El contenido no era otra cosa que el poema Agrippa, de William Gibson, ese texto que solo podía ser leído una vez ya que, tras abrir el archivo del disquete en el que se encontraba, el contenido se encriptaba y desaparecía.
Descifrando las partes del poema de Gibson que hacían referencia a los números primos, Eriksson dio con una dirección de la red anónima Tor, famosa por alojar la oscura Silk Road.
Eriksson había llegado hasta el final. Lo había logrado. Pero se estampó con un muro. Durante todo este proceso, se habían creado comunidades que compartían las pistas y la información referente a todo lo relacionado con Cicada. Este hecho no pareció gustarle mucho a la misteriosa organización que hay detrás de este rompecabezas, ya que, cuando llegó Eriksson – que afirma que no utilizó información de ninguna de estas comunidades, sino que llegó por sus propios medios hasta el final – solo pudo leer el siguiente mensaje: “Queremos a los mejores, no a los seguidores”. Frustrante.
Barra libre a la especulación
En enero de los dos años siguientes ha vuelto a ocurrir. Una pista inicial en algún rincón de internet ha supuesto el pistoletazo de salida de dos nuevas ediciones de Cicada 3301. Se llegue o no hasta el final, el gran misterio sin resolver es quién hay detrás de todo esto. Buscan a los más inteligentes, así que hay especulaciones de todo
tipo. Algunos piensan que son los servicios secretos de distintos países. Otros creen que solo es una campaña de marketing, o que se trata de alguna gran compañía tecnológica buscando a lo mejor de lo mejor para sus ya abultadas plantillas.
tipo. Algunos piensan que son los servicios secretos de distintos países. Otros creen que solo es una campaña de marketing, o que se trata de alguna gran compañía tecnológica buscando a lo mejor de lo mejor para sus ya abultadas plantillas.
Podemos desechar la opción de la campaña de marketing (¿qué campaña publicitaria dura tres años sin desvelar nada?) y Eriksson, por su parte, rechaza la opción gubernamental. “Si las agencias de inteligencia utilizan algo así para encontrar gente a la que reclutar, probablemente terminarán con una gran cantidad de personas que no están realmente interesados en trabajar para una organización como la suya”, asegura Eriksson.
En cualquier caso, sea quien sea quien forma la organización que hay detrás de todo este tinglado, hay que reconocerles mucho mérito. Al fin y al cabo, ya llevan tres ediciones de un rompecabezas en las que la gente se abalanza por descifrar, no ya solo su significado, si no además quién es el responsable. Además, Cicada 3301 debe ofrecer algo realmente interesante para los seleccionados, ya que nadie ha filtrado nunca nada. ¿O sí?
Tras aquella primera edición se filtró el correo electrónico que la organización envió a uno de los ‘reclutados’. El correo fue filtrado modificando su contenido, para que nadie de Cicada 3301, que enviaba distintos correos personalizados, pudiera encontrar al culpable. En el texto filtrado se puede leer:
Todos nos han preguntado lo que somos. Podemos decir que somos un grupo internacional, que no tenemos nombre, ni ningún símbolo, ni listas de miembros. No tenemos un sitio web público y no hacemos publicidad de nosotros mismos.
En ese mismo correo, 3301 se desligaba de cualquier actividad ilegal y formulaba al elegido una seria de preguntas:
- ¿Cree usted que todo ser humano tiene derecho a la privacidad y al anonimato y está en su derecho a utilizar las herramientas que ayudan a obtener y mantener la privacidad?- ¿Cree usted que la información debería ser libre?- ¿Crees que la censura daña a la humanidad?
Edición 2014
Hace unas semanas, un tuit volvió a arrancar la maquinaria. Cicada 3301 estaba en marcha una vez más. Como en las dos ediciones anteriores, se han creado comunidades para sumar fuerzas ante este complicado reto, aunque esta vez, las comunidades han dejado de mostrar sus pasos en cierto momento, para evitar quedarse fuera del proceso.
Hasta ahora, un poema de Ralph Waldo Emerson, un par de cuadros de Blake, un libro escrito con runas y un cuadro de Goya son las pistas que han ido encontrando los participantes por el camino, que por ahora, nadie ha terminado.
La leyenda de Cicada no hace más que crecer. El misterioso método de reclutamiento de esta organización secretaha inspirado canciones, poemas y, cómo no, merchandising (no oficial): tazas, chapas, camisetas…
A menos que ya estés luchando desde hace semanas por desentrañar el misterio de esta tercera edición, llegas tarde para incorporarte. Sin embargo, puedes ir preparándote mentalmente para coger el toro por los cuernos en enero de 2015. Si llegas al final, por favor, pásate por aquí y cuéntanos si detrás de todo esto hay una organización masónica, Google, la CIA o un par de adolescentes con acné desde su garaje. Te estaríamos eternamente agradecidos.
