Alguien que le conoció habla así de él:
.....Al Antonio que yo conocí se le podía querer y odiar al mismo tiempo. No era ningún santo. Nunca quiso serlo. Su camino fue el que eligió y pudo haber elegido y triunfado en cualquier otro. Pero no lo hizo. Eligió la música. Eligió el poblado. Eligió el arte.
El Antonio que yo conocí ganaba muchísimo dinero pero siempre estaba sin un duro. Podía comprar una guitarra el lunes, empeñarla el miércoles, recuperarla el sábado y volver a empeñarla el lunes siguiente. Supo vivir con todo y sin nada, y se enfrentaba a ambas situaciones con la misma tranquilidad y la misma entereza.... Leer más.
Uno se pone a recordar canciones, una me lleva a otra, a otros tiempos.
Unas cuantas de ellas...
A trabajos forzados me condenan...
Un clásico, Azul.
Canción de Joan Manuel Serrat dandole un toque muy personal.
El sitio de mi recreo, poco antes de morir..
Mirando estos vídeos, encuentro también a su amigo Enrique Urquijo. Pronto pondremos algo de él.
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